Hasta que la dignidad se haga costumbre

por comunicaONIC

Bogotá 12 de octubre de 2021

  • Comunicado de los y las jóvenes huelguistas del Pueblo Wayuu y Afro de La Guajira.

En la conmemoración del día de la resistencia, nuestro pueblo, por los que nuestros hermanos indígenas y afros entregaron sus vidas en la conquista de la libertad.  Hoy,  se encuentran bajo una segunda colonización, una nueva  forma de esclavitud y servidumbre que explota  nuestro territorio y nuestras comunidades sometiéndolas al yugo de la pobreza y miseria.    

En la Guajira  se producirá el noventa por ciento de la energía no convencional del país con sesenta parques eólicos, energía solar e hidrogeno verde, anuncio que hacia el  presidente Duque en la asamblea general de las naciones unidas mostrando nuestra transición energética  como un ejemplo para el mundo,  pero la lucha contra el cambio climático, en principio es la defensa de la vida misma no se puede salvar el clima del planeta si no puedes evitar que los niños mueran en los mismos  territorio  donde  se ha puesto y se pondrá  en marcha la explotación  invasiva de energías no convencionales ( eólica,  solar, hidrogeno verde) y de energía fósiles petróleo, gas  y carbón. Mientras se inician las instalaciones de los primeros 16 parques eólicos, cientos de comunidades desconocen los impactos socio-ambientales  de la  transición energética. Por su parte el gobierno nacional se resiste a publicar copias de las 750  consultas previas realizadas hasta hoy. Y las   comunidades  en  múltiples casos no han contado con  asesores que garanticen que los acuerdos hechos  con las multinacionales puedan beneficiar de manera real al territorio, incluso en la mayoría ni siquiera existió acompañamiento por parte del ministerio público. Los que sí tendrán  acompañamiento serán las multinacionales con la militarización absoluta del territorio que ya comenzó.   

En este mismo territorio la corte constitucional en sentencia T-302 del año 2017 emitió órdenes concretas para  detener la muerte por hambre y sed de los niños y niñas del pueblo wayuu, sin embargo, cruel  realidad es que el genocidio étnico continua pues hasta la fecha según datos oficiales han muerto 5.320 niñas y niñas y existen actualmente 16.000 en estado de desnutrición; vidas que  se encuentran en riesgo de apagarse por siempre, por el olvido de un gobierno qué los condena desde el vientre al hambre y la sed. Pero la muerte de los niños y niñas no solamente es física sino que también matan su derecho a educarse con dignidad.  en el departamento de la Guajira, en 5 de cada 10 colegios los niños tiene que hacer sus necesidades fisiólogicas al aire libre y en el 29 por ciento de ellas debe consumir agua de jagueyes. A pesar de que vivimos en departamento  con desnutrición, mortalidad infantil. Pobreza monetaria en la guajira solo 79 de cada 100 estudiantes son beneficiarios del PAE. la infancia en la guajira ha sido condenada  a caminar grandes distancias para acceder a la educación dando clases  bajo arboles de  trupillos y sentados en el suelo.  Así mismo de cada 100 niños que terminan el bachillerato en la guajira solo 5 de ellos tienen acceso a la educación superior.  

Si hablamos del derecho al mínimo vital de agua que en La Guajira  este no deja de ser un sueño inalcanzable pues en el territorio rural dispersos donde viven los indígenas y afros la cobertura de agua tan solo alcanza el 15 por ciento para el año  2021 y en los territorios urbanos no es potable ni permanente las 24 horas, por otra parte la salud en la guajira está en crisis toda vez que sus centros hospitalarios se encuentran en quiebra y la salud como derecho fundamental es tan solo el privilegio de unos pocos en un sistema que prefiere el capital por sobre las vidas humanas.

 Los precios de los combustibles  a pesar de ser territorio fronterizo en crisis social y económica son sumamente altos en comparación con departamentos como cesar, norte de Santander y Nariño los cuales se quedan con el 80 por ciento de los beneficios para estos territorios, no obstante encontrarse en muy buenas condiciones de desarrollo económico; mientras tanto la Guajira con una pobreza monetaria del  66 por ciento tan solo le corresponde el 5,9  de los cupos y tienen que sufrir con el alza desmedido de los precios no solo de los combustible sino también de la canasta familiar.

Hace un año el presidente Duque anunciaba con bombos y platillos a la región caribe Colombiana que la era de la infame electricaribe por fin había terminado, que la solución a todos los problemas del servicio de energía  seria AIRE. Un año después la realidad es otra. La nueva empresa aumento el costo de las tarifas en el departamento de La Guajira, Magdalena y atlántico. A día de hoy El kilovatio hora que valía en octubre del año pasado $497 pesos paso a tener un valor de $761 pesos, un aumento del 53 por ciento. En un  departamentos como la Guajira que tan solo para el próximo año  producirán más del 12 por ciento de la energía del país como cuota de inicio  hasta convertirnos en la matriz energética de la nación, no es justo  tengamos que pagar facturas tan elevadas sin ninguna tarifa diferencial por ser productor y lo que es peor, la mayor parte del territorio, ni siquiera está conectado al sistema de energía.

Por eso luchamos… El día de hoy nos inspiramos en los tantos miles de hermanos y hermanas que resistieron y lucharon siglos tras siglos para conquistar el derecho humano de ser libres, aquellos rostros y aquellas fuerzas nos alientan. Somos indígenas y negros disputándonos en el filo de la historia una nueva conquista por la libertad, resistiendo contra las formas de esclavitud modernas, acorazados de dignidad y conciencia, provistos de la esperanza de que algún día la vida humana será respetada y valorada de forma universal.

Los negros y los indígenas que luchamos hoy, somos los mismos que lucharon ayer y como la primavera renacerán las fuerzas y con la resistencia tarde que temprano venceremos.

  • NOS NEGAMOS A RENDIRNOS
  • HASTA QUE LA DIGNIDAD SE VUELVA COSTUMBRE.