Mandato de Macapá: llamado urgente a la acción para salvar el planeta

 

- Indígenas de nueve países de la cuenca amazónica suscriben mandato para la acción en Macapá, Brasil

COICA, 21 de junio, 2018.- Bajo el lema: “Amazonia viva, humanidad segura” la Coordinadora de Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (COICA) culminó la IV Cumbre Amazónica adoptando el Mandato de Macapá, en Brasil, documento estratégico de posicionamiento para un nuevo periodo.

El mandato fue adoptado por las organizaciones indígenas nacionales de nueve países que comparten la cuenca amazónica: Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana, Guyana Francesa, Perú, Suriname y Venezuela.

El documento servirá de orientación para el nuevo Consejo Directivo que será elegido en el X Congreso de la COICA a realizarse los días jueves 21 y viernes 22 en Macapá.

Cabe destacar que la COICA es la organización indígena internacional que representa a 450 pueblos indígenas amazónicos, que protegen actualmente 240 millones de hectáreas y tienen como principal demanda la titulación de 100 millones de hectáreas aún no reconocidas legalmente.

La región del Amazonas posee más de la mitad de todas las selvas tropicales del planeta. Con una extensión aproximada de 7,9 millones de km2, la cuenca del Amazonas se postula como la selva tropical más grande del mundo con una importancia especial en la lucha contra el cambio climático.

Sentido de urgencia

El Mandato de Macapá alerta que no queda más tiempo para salvar la Amazonia y la vida de la humanidad por lo que se adopta como mandato para la acción de los pueblos amazónicos y en la alianza con las entidades cooperantes.

Denuncia el aumento de la destrucción de los bosques y pueblos por el extractivismo, “lo que hará fracasar las metas climáticas del Acuerdo de París de reducción de emisiones”.

Advierte la incoherencia de los estados amazónicos con sus propios compromisos climáticos, y observa además que están “penetrados de profunda corrupción como lo revela el escándalo continental sobre infraestructuras y Odebrecht”.

Afirma que no tiene sentido esperar la “voluntad” de los Estados y que hay que “ejercer de hecho nuestros derechos colectivos” para atender el llamado de los espíritus del bosque, de que “los pueblos indígenas pueden ayudar efectivamente a salvar el mundo”.

En tal sentido, reitera que los derechos no se mendigan sino se ejercen, y que la vigencia de los derechos depende de su ejercicio efectivo mediante la unidad y fortaleza de las comunidades y organizaciones de nuestros pueblos.

Amazonía, ser vivo integral

Considerando que la cuenca amazónica es un gran ser vivo totalmente integrado e interconectado por lo que llama a sus aliados y a la cooperación a superar las intervenciones fragmentadas para que toda acción se despliegue en los nueve países, atendiendo al carácter transfronterizo de la cuenca que supera los límites de los estados nacionales.

Principales acuerdos:

- Reiterar el llamado de setiembre 2017 para conformar una misión de emergencia de las Naciones Unidas ante las graves amenazas a la Amazonia.

- Convocar a las organizaciones indígenas amazónicas y del mundo, y aliados, a realizar acciones articuladas con sentido de urgencia como las siguientes:

  • Organizar un equipo para la defensa en la acción jurídica, política e incidencia.
  • Juicio a los Estados ante la CIDH, OIT, CERD, ONU por la inseguridad jurídica territorial y la no titulación territorial de 100 millones pendientes.
  • Movilización por “Amazonía Viva, Humanidad Segura” el 21 de setiembre del 2018.
  • Rechazar las violaciones de los derechos colectivos por grandes proyectos de infraestructura y extractivos, que promueven todos los Estados, sea del color político que fuera, y que se imponen sin consulta previa, sobre territorios indígenas y áreas protegidas, y que ocasionan persecución a quienes los cuestionan. Por ejemplo:
  • Bolivia: Hidroeléctricas Bala, Chepete y Rositas, infraestructura caminera y agresión al Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS).
  • Brasil: Agresiones a pueblos en Pará, Mato Grosso, Tocantins, Rondonia; y desmonte de la Fundación Nacional del Indio (FUNAI). No al retroceso de derechos y ¡Demarcación Ya!
  • Colombia: Locomotora minera y retroceso en derechos e integridad de los resguardos indígenas.
  • Ecuador: Ley de tierras e invasión minera y petrolera.
  • Guyana Francesa: Incumplimiento del Acuerdo de Kayenne entre pueblos indígenas y Francia impide superar siglos de negación racista y colonial a reconocer territorios, identidad y derechos como pueblos.
  • Guyana y Surinam: Afectación de la minería y la tala de madera.
  • Perú: Hidrovía amazónica, carreteras fronterizas, monocultivos de palma aceitera, titulación pendiente, etc.
  • Venezuela: Programa estatal minero del Arco del Orinoco está destruyendo 12% del país incluidos sus bosques y pueblos indígenas. 

Conozca los acuerdos y demandas completas del Mandato de Macapá accediendo al siguiente enlace: