Pueblos Indígenas exigimos presencia de oficinas de la ONU en Colombia

La presencia de las Naciones Unidas en Colombia ha posibilitado la visibilización, denuncia y verificación de los derechos de los Pueblos Indígenas.[/caption]

Frente a las afirmaciones del presidente Juan Manuel Santos durante la visita de la Comisionada de las Naciones Unidas en Colombia; en las cuales categóricamente señaló que “No necesitamos más oficinas de Derechos Humanos de la ONU en nuestro país”, la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC), rechaza vehementemente lo que a todas luces puede entenderse como una solicitud que desconoce las realidades victimizantes que a la fecha afrontan los Pueblos Indígenas a lo largo y ancho del territorio nacional, como las que reiteramos a continuación:

1. La existencia a la fecha del conflicto armado en Colombia es inminente, fenómeno de violencia que comprende un panorama claro de vulneraciones de Derechos Humanos e infracciones al Derecho Internacional Humanitario (en cabeza de actores armados legales, ilegales y agentes estatales), discriminación, estigmatizaciones, persecuciones y, los factores subyacentes y vinculados al mismo, hacen que a la fecha los Pueblos Indígenas somos víctimas de un genocidio que nos está forzando al exterminio físico y cultural.

2. La situación de violencia y exterminio tiende a intensificarse a través de homicidios, desapariciones forzadas, desplazamientos forzados, reclutamientos forzados, violencia sexual, amenazas y demás delitos, generan afectaciones colectivas e individuales que perjudican de forma profunda a los 102 Pueblos Indígenas que existen en el país.

3. Identificados en la actualidad, y en concordancia con la Corte Constitucional Colombiana, la existencia de 35  pueblos indígenas en riesgo inminente de extinción física y cultural, por factores asociados a intereses económicos, extractivos y del conflicto armado; resulta imperativo adicionar a esta alarmante cifra un total de 31 pueblos que quedaron excluidos de las órdenes de salvaguarda y protección desprendidas del Auto 004 de 2009, los cuales cuentan con una población menor a 500 personas, 18 tienen una población inferior a 200 miembros y 10 están conformados por menos de 100 individuos.

4. Sumado a lo anterior, según el informe de genocidio y crímenes de lesa humanidad realizado por la Consejería de Derechos de los Pueblos indígenas, DDHH, DIH y Paz de la ONIC, presentado al Sistema de Naciones, al Relator Especial, al Foro Permanente para Asuntos Indígenas, se constituyen en elementos probatorios sobre la perpetración de crímenes de lesa humanidad sobre los Pueblos Indígenas en Colombia. Los reportes del Sistema Unificado de Información sobre Pueblos Indígenas ONIC-CECOIN, arroja cifras contundentes que corroboran que en Colombia se presenta un genocidio contra los Pueblos Indígenas. Remitiéndonos de manera exclusiva al período 2009-2012, etapa en la que han aparecido indicios del genocidio en documentos oficiales, que por su autoridad constituyen material probatorio[1], el Sistema de Información demuestra que el riesgo de genocidio se acentúa. Entre los años 2009 y 2012, tomando únicamente los indicadores de homicidio y desplazamiento forzado, resulta evidente que nos encontramos en un escenario de lesa humanidad: 438 homicidios y más de 22 mil indígenas desplazados.

5. En lo corrido del presente año, las cifras de vulneraciones a los derechos humanos de los Pueblos Indígenas dan cuenta que las violaciones siguen en aumento, reportando indicadores en desplazamiento de 1.506 personas, 23 víctimas de homicidios, amenazas y detenciones a 20 personas, confinamiento de 5.847 víctimas (conteo individual) y el reclutamiento forzado de dos personas entre enero y julio del año 2013.

6. La presencia de las oficinas de las Naciones Unidas en Colombia han posibilitado escenarios de visibilización, denuncia, verificación, salvaguarda, fortalecimiento y financiación, en el marco de las más atroces vulneraciones de derechos de los Pueblos Indígenas; su accionar ha morigerado las afectaciones y obligado al Estado Colombiano, ese que ahora las encuentra innecesarias, a cumplir cabalmente instrumentos internacionales de Derechos Humanos, normas y jurisprudencia del orden nacional; su acompañamiento ha sido determinante en los territorios indígenas donde la presencia de actores armados y megaproyectos vulneran de forma sistemática los derechos de los Pueblos Indígenas.

La Organización Nacional Indígena de Colombia ratifica como indispensables las tareas que asumen las oficinas de Naciones Unidas en Colombia, respalda la labor desarrollada durante muchos años en beneficio de la población indígena y le recuerda al Gobierno Nacional que la oficina de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en Colombia fue la única instancia internacional que acompañó la misión de rescate de las víctimas de la masacre del pueblo Awá en agosto del año 2009.

En nombre de los Pueblos Indígenas de Colombia, la ONIC solicita a la Alta Comisionada emprender acciones que desvirtúen las afirmaciones emitidas por el señor Presidente de la República, quien pretende invisibilizar la realidad que en el marco del conflicto armado, la pobreza y la discriminación golpean a los 102 Pueblos Indígenas que perviven en Colombia.

 

CONSEJO MAYOR DE GOBIERNO

AUTORIDAD NACIONAL DE GOBIERNO INDIGENA- ONIC

UNIDAD, TIERRA, CULTURA Y AUTONOMIA


[1] La autoridad jurídica del Auto 004 de 2009 de la Corte Constitucional y el Estudio de Derecho Penal Internacional y Defensa Judicial de los Derechos de los Pueblos Indígenas del Foro Permanente, constituyen piezas probatorias imprescindibles, tanto para la Justicia Penal Colombiana como para la Fiscalía de la Corte Penal Internacional.